Nada es demasiado.

Aprendo demasiado rápido y práctico demasiado lento…a veces parece que todo fuera muy rápido, muy lento y demasiado.

Tengo muchas dudas de lo que debo hacer, todos dicen de todo, quien debe decir algo concreto como siempre calla, se aleja, se olvida, advierte y es no sé.
Todo parece ser ensalada vomitada en el cerebro que es mío pero que a veces trato de imaginar que es de una persona F, una que no tiene ninguna relación conmigo y me digo “Es conveniente” pero no lo es.

Observo la portada de un álbum, uno que adornó todo en el momento en que todo parecía desordenado, confuso, inevitable, doloroso y sigo sin estar en mucho, me muero por escuchar de qué me perdí cuando parecía que todo se perdía. Sin embargo sólo alcanzo a escuchar las voces de personas tan desorientadas como yo, tan negativas que lo pintan todo negro y un silencio inaudito, venenoso con guiños y preguntas que no llevan a ningún lado.